Imagina el miedo al conflicto como un barco a la deriva en un mar tempestuoso. Este barco representa tus relaciones, y el temor al conflicto es como navegar sin brújula, evitando las tormentas a toda costa para mantener la calma en la superficie. Al hacerlo, te encuentras navegando en aguas desconocidas, rodeado de nubarrones que representan las tensiones no resueltas y las emociones no expresadas. Evitas confrontaciones para mantener la paz, pero al mismo tiempo, te encuentras perdido en un océano de incomodidad y resentimiento.
La terapia te enseña a navegar ese barco con destreza. Yo te ayudaré a tomar conciencia de qué acciones significan para ti agarrar fuerte el timón, a comprender las corrientes emocionales y a enfrentar las tormentas con valentía.
Cada sesión es como una lección de navegación. Aprendes a trazar tu curso y a comunicar tus límites como anclas que mantienen tu barco estable. Con mi asesoramiento no solo aprendes a navegar en aguas turbulentas, sino que descubres que el conflicto bien manejado puede ser una oportunidad para fortalecer tus relaciones y encontrar una calma más profunda en el mar de la vida.